En una jornada marcada por la intensidad, el talento y el creciente interés del público por el fútbol femenino, Colo-Colo Femenino se consagró campeón de la Liga Femenina 2025 al derrotar por 1-0 a Universidad de Chile en la gran final disputada este sábado 6 de diciembre en el Estadio Bicentenario de La Florida. Con este triunfo, las albas cerraron una temporada perfecta que les permitió levantar su tetracampeonato, reafirmando su condición de equipo dominante en el panorama nacional.
Un estadio repleto y un ambiente digno de una final mayor
Miles de hinchas llegaron hasta La Florida para presenciar el clásico femenino más esperado del año. Colo-Colo y Universidad de Chile, los dos equipos más regulares del campeonato, protagonizaron un espectáculo de alta exigencia futbolística, con una cobertura mediática inédita y una audiencia digital que siguió cada momento del encuentro.
Ambos clubes llegaron a la final tras superar con autoridad sus respectivas semifinales: Colo-Colo venció a Coquimbo Unido Femenino, mientras que la U dejó en el camino a Unión Española. La final, entonces, se transformó rápidamente en un duelo de estilos, historia y orgullo deportivo.
Primer tiempo de estudio y un golpe albo en el momento clave
El compromiso comenzó con un dominio alternado, donde ambos elencos buscaron controlar el mediocampo y aprovechar la velocidad de sus atacantes. La U tuvo la primera llegada clara con un remate desde fuera del área, mientras que Colo-Colo respondió con acciones profundas por la banda derecha.
El momento decisivo llegó a los 32 minutos, cuando Yessenia López aprovechó un error en la salida azul para definir con precisión y marcar el 1-0 que finalmente le daría el título al cuadro albo. El gol desató la euforia en las tribunas y obligó a Universidad de Chile a modificar su planteamiento.
Segundo tiempo: presión azul, resistencia alba
En la segunda mitad, Universidad de Chile adelantó sus líneas en busca del empate, generando dos oportunidades claras que pusieron a prueba a la defensa y a la arquera colocolina. Sin embargo, la solidez defensiva alba —uno de los sellos del equipo durante toda la temporada— permitió neutralizar cualquier intento azul.
Colo-Colo apostó por la administración del juego y por contraataques rápidos que estuvieron cerca de ampliar la diferencia. El reloj avanzó y la tensión creció en el estadio, hasta que el pitazo final confirmó el triunfo albo y el estallido de alegría entre jugadoras, cuerpo técnico y aficionados.
Un tetracampeonato que marca un antes y un después
El título de 2025 tiene un valor especial para el club albo, ya que consolida un proceso deportivo basado en formación juvenil, refuerzos estratégicos y una identidad de juego que se mantiene desde hace varias temporadas. La campaña invicta y el rendimiento colectivo posicionan a Colo-Colo Femenino como uno de los equipos más competitivos del continente rumbo a la Copa Libertadores Femenina 2026, donde ya tiene asegurado su cupo.
Para Universidad de Chile, en tanto, la final representa una nueva oportunidad de crecimiento. El equipo azul mostró un avance sostenido y un plantel equilibrado, por lo que se espera que vuelva a ser protagonista el próximo año.
El impacto del fútbol femenino chileno sigue creciendo
Más allá del resultado, esta final confirma el notable desarrollo del fútbol femenino en Chile. La masiva presencia de público, el aumento de transmisiones televisivas y el nivel táctico exhibido por ambos equipos reflejan un deporte que avanza hacia la profesionalización plena y que continúa capturando el interés de nuevas generaciones.
La final Colo-Colo vs Universidad de Chile no solo coronó a las nuevas campeonas: también reafirmó que el fútbol femenino chileno vive su mejor momento histórico.
